LA REPETICIÓN DEL MILAGRO DE LOS PANES Y LOS PECES

"Con alegría y profunda gratitud nos dirigimos, desde este comedor, a todos los tinerfeños que en tiempo de Navidad han hecho que nuestra despensa rebose, para que no nos falte el alimento y la ayuda material con la que día a día asistimos a tantas personas que lo necesitan", han señalado en un comunidado las Hijas de la Caridad del Comedor de la Noria de la capital tinerfeña.

Además, han señalado, como recoge europapress, que "si inmensa ha sido la ayuda, más grande su mérito", pues ha sucedido "como lo quiere el Señor", esto es, de forma anónima. "En medio de una sociedad consumista y materialista, ahogada por la crisis económica y despojada de valores tan esenciales como el respeto a la vida, el perdón o la misericordia, contemplamos gozosos como el amor de Dios, traducido en amor al prójimo, se ha colado por las fisuras de nuestras gentes, para que se repita una vez más el milagro de la multiplicación de los panes y los peces", han subrayado las Hijas de la Caridad que han agradecido a "todos" los que se han acercado hasta la calle de La Noria, especialmente, a colegios e institutos para colaborar con el sostenimiento de la Casa.

"Las Hijas de la Caridad hemos sido testigos de cómo la solidaridad irrumpió, como la estrella de Belén, para acampar entre todos nosotros. Esto ha permitido que la Navidad 2010 recobre su cristiano y auténtico sentido", han testimoniado por último las conocidas popularmente como monjas de la calle de La Noria.