Cuando nos disponíamos a cerrar en este blog por el día de hoy con sonidos de la expedición joven diocesana en la JMJ, nos llega un correo electrónico del grupo de Los Realejos, Arona y San Miguel de Abona en donde nos cuentan las vivencias de una jornada calurosa en la “capital de la fe”. En nombre de todos, uno de los animadores, Alejandro Abrante comparte con todos lo siguiente:
19 de agosto. Esta mañana hemos tenido una experiencia maravillosa. Como andábamos ajustados de tiempo, rezamos Laudes mientras íbamos de camino al metro. Fue muy curiosa la reacción de algunas personas al ver a una muchedumbre de jóvenes cantando himnos y rezando salmos por la calle. Luego asistimos a la catequesis en la parroquia de San José, impartida por Monseñor Marcelo, obispo argentino. Este comentó el padrenuestro citando a Sto. Tomás, advirtiendo que la voluntad de Dios es que vivamos nuestra libertad plenamente, a la vez que nos exige un reparto justo de las riquezas (“denle ustedes de comer”). También recordó que el “pan nuestro” es el pan del alimento, el pan de la cultura, pero sobretodo el alimento espiritual, el Pan de la Eucaristía. Terminó comentando que la expresión "líbranos del mal", significa que el mal que Dios permite, nos sirve siempre para un bien mayor. Luego se sucedieron los testimonios de varios jóvenes de diversos países latinoamericanos, sobre la experiencia de oración, para terminar con un turno de preguntas al obispo sobre este tema.
Después recorrimos Recoletos, contemplando todos los pasos que saldrían por la tarde en el Viacrucis. Más tarde acudimos a la feria de las vocaciones y la fiesta del perdón, en el parque del Retiro.
Durante el Viacrucis, en el discurso final, el Santo Padre explicó que “la belleza del arte y la fe, se armonizan para tocar el corazón del hombre”. “Cristo murió por nosotros, pero la cruz no es símbolo de fracaso sino de entrega, por eso debemos preguntarnos: qué estoy dispuesto a entregarle al que se entrego por mí?” Con esta pregunta resonando en nuestro interior, nos encontramos en medio del Retiro con el Icono de la Virgen de las JMJ que estaba ubicado donde el Papa confesará mañana a un grupo de jóvenes. Y con esta imagen en la retina a descansar toca. Mañana a Cuatro Vientos
19 de agosto. Esta mañana hemos tenido una experiencia maravillosa. Como andábamos ajustados de tiempo, rezamos Laudes mientras íbamos de camino al metro. Fue muy curiosa la reacción de algunas personas al ver a una muchedumbre de jóvenes cantando himnos y rezando salmos por la calle. Luego asistimos a la catequesis en la parroquia de San José, impartida por Monseñor Marcelo, obispo argentino. Este comentó el padrenuestro citando a Sto. Tomás, advirtiendo que la voluntad de Dios es que vivamos nuestra libertad plenamente, a la vez que nos exige un reparto justo de las riquezas (“denle ustedes de comer”). También recordó que el “pan nuestro” es el pan del alimento, el pan de la cultura, pero sobretodo el alimento espiritual, el Pan de la Eucaristía. Terminó comentando que la expresión "líbranos del mal", significa que el mal que Dios permite, nos sirve siempre para un bien mayor. Luego se sucedieron los testimonios de varios jóvenes de diversos países latinoamericanos, sobre la experiencia de oración, para terminar con un turno de preguntas al obispo sobre este tema.
Después recorrimos Recoletos, contemplando todos los pasos que saldrían por la tarde en el Viacrucis. Más tarde acudimos a la feria de las vocaciones y la fiesta del perdón, en el parque del Retiro.
Durante el Viacrucis, en el discurso final, el Santo Padre explicó que “la belleza del arte y la fe, se armonizan para tocar el corazón del hombre”. “Cristo murió por nosotros, pero la cruz no es símbolo de fracaso sino de entrega, por eso debemos preguntarnos: qué estoy dispuesto a entregarle al que se entrego por mí?” Con esta pregunta resonando en nuestro interior, nos encontramos en medio del Retiro con el Icono de la Virgen de las JMJ que estaba ubicado donde el Papa confesará mañana a un grupo de jóvenes. Y con esta imagen en la retina a descansar toca. Mañana a Cuatro Vientos
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