Manteniendo las costumbres propias de la espiritualidad franciscana, al término de la misa de ayer domingo 7 de octubre, la parroquia de S. Francisco en la capital palmera bendijo y repartió el "pan de los pobres". Un signo que pretende ir más allá de lo que se entrega, pues el gesto se convierte en una invitación a no olvidarse de los necesitados, sea cual sea su necesidad.
Por ello, desde ayer y hasta fin de mes, en la Capilla de S. Nicolás, dentro del templo parroquial, se recogerán todos aquellos alimentos que la generosidad de los feligreses considere oportuno.
No hay comentarios:
Publicar un comentario