El Papa se ha reunido esta mañana con los cardenales presentes en Roma. El Santo Padre les ha agradecido su ayuda en estos años en los que "hemos intentado servir a Cristo y a su Iglesia con amor profundo y total". Benedicto XVI ha querido dejarles un pensamiento sencillo, pero muy estimado para él, sobre la Iglesia que constituye, para todos nosotros - ha dicho- la razón y la pasión de la vida. En este sentido recordando a Guardini ha dicho que la Iglesia es una realidad viva, transformándose constantemente como todo organismo vivo, pero que en su naturaleza permanence siempre la misma; su corazón es Cristo - indicó el Papa.
Con emoción, Benedicto XVI prometió ante los cardenales reunidos para despedirle «mi reverencia y obediencia incondicional al próximo Papa».
No hay comentarios:
Publicar un comentario